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Volumen 8, Número 113, octubre 13 de 2008 www.wftucentral.org
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Nuevo "kilowatazo" a la vista



La privatización eléctrica furtiva ha tenido múltiples efectos dañinos para la nación. Cada vez es mayor la generación eléctrica privada y los enormes pagos que la CFE hace a las transnacionales y sus filiales. Para los usuarios, especialmente consumidores domésticos, eso se ha traducido en una creciente elevación de las tarifas. Ahora, la CFE proyecta una estructura tarifaria que anuncia tarifas más altas. Es preciso organizar la resistencia social, el pueblo no tiene porqué cargar los costos que significan mayores ganancias privadas. La reforma energética neoliberal debe ser impedida y, la privatización eléctrica furtiva, revertida.


CFE solicita un fuerte aumento de tarifas

Según el Proyecto de Presupuesto de Egresos 2009 (PPE-2009), Tomo V, entidades de control directo [http://www.apartados.hacienda.gob.mx/presupuesto/temas/ppef/2009/index2.html], la Comisión Federal de Electricidad (CFE) espera aumentar sus ingresos en un 20.8% en ese año. Tal aumento, mucho mayor que la inflación prevista para el mismo período, fue programado en base principalmente al aumento de las tarifas eléctricas, ya que, considerando la grave crisis económica en curso, es impensable un crecimiento significativo real de nuevos servicios.

El gasto programado por la administración de CFE para 2009 supera los 428 mil millones de pesos (mdp), que es 2.8% menor en términos reales que el del año pasado. De esos recursos, CFE generará por sí sola 276.5 mil mdp, la mayor parte de ellos por venta de servicios.

La distribución de ese gasto incluye el financiamiento de 361 proyectos etiquetados bajo distintos rubros (inmuebles, adquisiciones), entre los que sobresale una enorme mayoría de proyectos de infraestructura económica, construidos prácticamente todos bajo la modalidad de los Proyectos de Inversión Diferida en el Registro del Gasto (Pidiregas), es decir obra realizada por contrato (obra nueva de infraestructura, sobre todo).

La CFE argumenta el aumento diciendo que "la fijación de las tarifas eléctricas es un mecanismo importante para la formulación de la política energética del país. Por ello, se ha trabajado en una estructura tarifaria que envíe señales apropiadas de eficiencia económica y promueva el uso eficiente de la energía eléctrica, sin perder de vista el objetivo de alcanzar una relación precio/costo que permita el sano crecimiento de la empresa y le genere los recursos que requiere para financiar los programas de expansión de su infraestructura eléctrica".

Son privados, los principales beneficiarios

Los anexos del PPE-2009 revelan que una parte de ese presupuesto tendrá como destino real el pago de energía a los privados: casi 41 mil mdp, que vendrán a sumarse al billón y medio de pesos ($1,435,623,792,588.00) que hasta 2007 ya se les habían pagado por el mismo concepto.

Se trata de un verdadero despojo a la nación, ya que, adicionalmente, CFE pagará 12 mil mdp por cargos fijos de capacidad (a la fecha se han pagado casi 44 mil) y 41 mil mdp más por cargos variables, según el desglose de los diversos Pidiregas [http://www.apartados.hacienda.gob.mx/presupuesto/temas/ppef/2009/ramos/t1o.html].

En contrapartida, la CFE plantea otorgar subsidios por 106 mil 570 millones de pesos. Esta cantidad es superior al año pasado, pero quedará anulada por los aumentos de tarifas que se anuncian, además de una pésima distribución, donde los grandes consumidores (industriales) son quienes pagan menos.

Otra tajada importante está comprometida al pago de los llamados Pidiregas (81 mil mdp), muchos de originados por las obras necesarias para incorporar la generación de los privados. Es decir, que mientras los generadores privados disfrutan ya de exorbitantes ganancias, la CFE no termina aún de pagar las obras de infraestructura requeridas para incorporar dicha generación al sistema eléctrico (Ver PPE-2009). Se trata de los llamados Productores Independientes de Energía (PIE), además, de la Terminal de Carbón de la CT Pdte. Plutarco Elías Calles y los gasoductos de Cd. Pemex-Valladolid y Samalayuca

Pero lo más importante es que, ni siquiera en caso de existir realmente un "superávit" en las finanzas de la CFE, éste sería absorbido por el propio gobierno, ya que las empresas públicas no pueden disponer de los excedentes que, por otra parte, tampoco serían utilizados por la secretaría de hacienda (SHCP) para equilibrar el sistema tarifario, ya que hasta ahora los principales beneficiados por ésta son los industriales y los grandes consumidores.

Evidentemente, las "señales" que envía CFE tienen otro destinatario. Veamos.

CFE-Telecom ¿una nueva empresa telefónica?

El otro asunto que comprometerá las finanzas de CFE se refiere al casi abortado proyecto para obtener ingresos adicionales vía la comercialización de su red de fibra óptica.

De ocurrir, las cableras se habrán salido con la suya, solapadas por la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), quien obligaría a la CFE a ofrecer dos tipos de servicios. El que interesaba a los privados era el servicio llamado de "fibra oscura", que consiste en que la CFE entregue los posibles arrendatarios íntegramente la infraestructura de fibra óptica nacional. La operación de dicha red de datos sería a cargo de los privados, quienes incluso instalarían su propio equipo electrónico de transmisión de datos. Cabe mencionar que parte de esa red, construida con un alto costo y justificada en su casi fallida comercialización, todavía está en construcción (miles de kilómetros aún, según el PPE-2009). No obstante los privados ya pretenden apropiársela.

La CFE hizo cuentas alegres a partir de ofrecer solamente el servicio conocido como "fibra iluminada", consistente en conservar la operación de la red de datos, con equipo propio (Ver proyecto 0818TOQ0052 en el PPE-2009), para rentar solamente algunos canales del ancho de banda sobrante, que es bastante, dadas las necesidades reales de la CFE.

Ahora, la ofensiva de las cableras está centrada en hacer que la Cofetel obligue a la CFE a crear una especie de filial (u otra paraestatal o empresa mixta), que haga contrapeso al monopolio constituido por Teléfonos de México (Telmex), que domina el mercado y establece las tarifas de las telecomunicaciones en México.

El aventurerismo con que Alfredo Elías Ayub, su actual "director", ha conducido a CFE es motivo para fincarle responsabilidades, ya que, el "fracaso" en la diversificación de CFE afecta directamente al patrimonio y organización de la paraestatal. Todavía, a principios de septiembre, se publicó en el Diario Oficial (DOF, 5.09.2008) la enésima reforma al Estatuto Orgánico de la Comisión, para adecuar su estructura a la operación de servicios de telecomunicaciones.

La situación, de paso compromete los planes de Luz y Fuerza del Centro (LFC), la otra paraestatal eléctrica, que también había apostado parte de su rehabilitación financiera a un plan similar, con la explotación de su propia infraestructura de telecomunicaciones (LFC-Telecom).

El episodio bien podría considerarse una revancha de Luís Téllez Kuenzler quien, luego de ser “derrotado” como secretario de energía con el rechazo a la llamada reforma constitucional que privatizaría directamente la electricidad de México, encuentra desquite contra los electricistas, desde su nuevo puesto como secretario de comunicaciones. Duro golpe a quienes se suman acríticamente al proyecto de modernización neoliberal de las empresas ESTRATÉGICAS de México.

Cabildeando la reforma energética en EU

Calderón, invitado a la 63 conferencia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), aprovechó para hacerse invitar a la apertura de una sesión más de la Bolsa de Nueva York. También ofreció una "conferencia" en el exclusivo Club Económico de Nueva York, centro de reunión del capitalismo mundial, en el que regularmente hacen pasarela personajes del escenario político y económico mundial. Es el mismo sitio donde, todavía en marzo pasado, George Bush aseguraba que la crisis crediticia en EU, la que hoy estimula la especulación en todas las bolsas del mundo, estaba controlada.

El viaje de Calderón tenía como objetivo principal renovar el apoyo del capital financiero a la pretendida reforma energética mexicana. Allá, Calderón "tradujo" al lenguaje financiero la situación económica de las clases populares de México: reducción de deuda (extranjera, que se refiere más bien al puntual pago de los intereses, por encima del gasto social); disposición de amplias reserva monetaria (en dólares, utilizados las más de las veces para fomentar la especulación) y el aumento de la base impositiva (sí, mayores impuestos y costo de los servicios), así como un mejor balance (recorte) del presupuesto público.

El otro "mensaje" calderonista quedó cifrado en un tema recurrente en tan "respetable" audiencia: la seguridad en México. Ya en su discurso en la ONU, Calderón había aludido a las amenazas a la seguridad global, en el más puro estilo bushiano, pidiendo incluso una silla en el Consejo de Seguridad de la ONU. Luego, en la intimidad del club de banqueros, las respuestas de Calderón dejaron entrever que un "adecuado" manejo permitirá al gobierno de facto militarizar al país ante la eventualidad de mayores protestas populares. Tan brillante estrategia mereció aplauso de pié de los muchachos del Club... Militarización y dictadura ¡como en los mejores tiempos de EU en América Latina!

Resistir cualquier aumento de tarifas

Aunque en México existen diversos movimientos de resistencia a las altas tarifas eléctricas, sus demandas no han sido incluidas en la lógica de la defensa de los recursos energéticos de México. Los partidos políticos dan generalmente un manejo clientelar al asunto, pugnando por soluciones temporales consistentes en arreglos particulares o en la aplicación indebida de tarifas, en lugar de buscar la reestructuración del sistema tarifario.

Las altas tarifas tienen su origen en el "mercado eléctrico", que pervirtió la operación del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) para facilitar la compra de energía a los generadores privados. Hoy día, de manera inconstitucional, más del 48% de la generación eléctrica equivalente se ha privatizado, en concesiones que durarán 25 años o más, si se les permite renovarlas. Ello garantiza que la tendencia alcista siga en aumento por un largo período.

Es preciso modificar esta situación. Uno, mediante el rechazo a la reforma energética promovida por Calderón y partidos políticos y, dos, activando el fortalecimiento y/o construcción de organizaciones sociales que permita revertir la privatización furtiva.
(b248, 28 sep 2008).



Centro Nacional de Control de Energía


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