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NOTICIAS, ANÁLISIS Y PROPUESTAS DEL SECTOR ENERGÍA
Volúmen 1 Número 11 / 26 de octubre de 2001
Foro Eléctrico: Crítica y Propuestas

Ocho trabajos se presentaron en el I Foro Eléctrico Nacional organizado por el Frente de Trabajadores de la Energía (FTE) de México. El evento se realizó el 26 de septiembre de 2001, en la Universidad Obrera de México, con la presencia de trabajadores electricistas del SME, nucleares del SUTIN y petroleros del STPRM, así como invitados de diversas organizaciones. Fue éste, el preludio del XLI Aniversario de la nacionalización de la industria eléctrica.

El evento fue presidido por los compañeros Humberto Plata, César Torroella y David Bahen, en su carácter de exdirigentes sindicales del SME y del SUTIN. En la apertura del I Foro intervino José Manuel Pérez Vázquez, integrante de la Comisión Política del FTE.

Conducido por Sergio Gómez, exsecretario general del SUTIN, el I Foro se llevó a cabo en dos sesiones, una sobre Política Eléctrica Independiente y, otra, sobre Reestructuración Eléctrica.

1. Política Eléctrica Independiente.

En la primera sesión hubo cuatro trabajos.

I

Primero se presentó la Política Energética Independiente que propone el FTE.

David Bahen, maestro en física e investigador petrolero, señaló que la nacionalización eléctrica ha sido, y es, una propuesta de los trabajadores. Este fue un hecho de gran trascendencia política para la Nación mexicana. En aquel momento, los electricistas expresaron que era importante definir una adecuada política en materia eléctrica.

En la presente ocasión, el FTE presentó las bases de nuestra política eléctrica enmarcada en una política energética independiente cuyas bases son: Exclusividad del Estado en materia de energía, Propiedad y control estatal de las industrias energéticas, Uso racional de los recursos naturales energéticos, Desarrollo social democrático y Soberanía Nacional.

Esta política se expresa en un Programa Nacional de Energía, mismo que se integra con el Plan Nacional de Hidrocarburos, el Plan Eléctrico Nacional y el Plan Nacional de Investigación y Desarrollo en Energía. El programa se basa en la integración de la industria petrolera, la integración de la industria eléctrica y la integración de los institutos de investigación del sector.

También se presentaron un conjunto de líneas de política energética, que incluyen acciones en materia de hidrocarburos, electricidad, ciencia y tecnología en energía.

En el primer caso, se propone que la producción de hidrocarburos sea para la satisfacción de las necesidades internas, que la suspensión de la exportación de petróleo crudo y que se reorienten las actividades hacia la producción de petrolíferos y petroquímicos. Tratándose de la electricidad, se propone la integración de la industria eléctrica nacionalizada en un solo Organismo, la suspensión de los permisos privados de generación y transmisión eléctrica y la realización de obras e inversiones mediante administración directa. En el tercer caso, la integración de los actuales institutos de investigación y desarrollo del sector en un Instituto de Energía.

Esta política considera a la energía en el contexto de la lucha por un nuevo proyecto de Nación. En este sentido, los trabajadores asumimos todas las consecuencias, pues la integración de la industria eléctrica es un proceso inconcluso que debe culminar. Esto implica la necesaria unidad sindical de los electricistas y nucleares del SME, SUTERM y SUTIN.

II

Juan Carlos Escalante, trabajador electricista de LFC e integrante del SME, abordó el tema de la Integración Energética Hemisférica.

Se trata, dijo, de un viejo proyecto del imperialismo para su propio desarrollo, la reorientación de su estructura comercial, el reacomodo de la economía mundial y la satisfacción de los requerimientos energéticos, con recursos propios y del exterior.

El desarrollo energético de los Estados Unidos (EU) está vinculado al desarrollo histórico de su estructura comercial.

En las últimas dos décadas, la demanda de energía creció en 17% y se espera que crezca en 32% hacia el 2020. En 2000, los Estados Unidos consumieron 19.5 millones de barriles de petróleo diarios, esto es, el 25% del consumo mundial. El consumo de petróleo y gas es mucho mayor que la producción interna. De gas también se importa la mayor parte y las reservas propias son apenas el 3.2% de las mundiales.

El petróleo representa más del 40% del consumo de energía primaria y más del 50% del total es importado. Más del 46% de esas importaciones provienen de la Organización de Países Exportadore4s de Petróleo (OPEP). Del Golfo Pérsico se importa el 22%. Los principales proveedores de EU son Canadá, Arabia Saudita, Venezuela y México. Después, Nigeria e Irak.

Hacia el 2020, los EU estiman que su producción interna declinará más aún y el consumo aumentará hasta 25.8 millones de barriles diarios de petróleo, representando las importaciones el 77% del consumo.

El gobierno norteamericano ha propuesto un Plan Energético que, entre otros aspectos, pretende incrementar la oferta energética. Este plan tiene varias prioridades. 1- En América Latina, se propone extender el libre comercio para consolidar este mercado en los sectores manufacturero y petrolero, 2- El Plan Colombia en el triángulo estratégico del Sur: Ecuador, Venezuela y Colombia. Estos países son productores de

petróleo y disponen de reservas alternas frente a la inestabilidad del Medio Oriente. En la misma prioridad está el Plan Puebla-Panamá que responde a los intereses de seguridad nacional de EU, 3- El Medio Oriente, donde están las reservas de petróleo más importantes del mundo.

Con el Plan los EU esperan lograr varios objetivos, entre otros, recuperar su dinámica económica, garantizar su seguridad nacional en materia energética y recuperar su papel en la disputa por el poder mundial.

Los planes para América Latina incluyen: el Acuerdo de Libre Comercio para las Américas, la Integración Energética Hemisférica, el Plan Colombia y el Plan Puebla Panamá. Se trata en breve síntesis de un plan para subordinar al mundo a los intereses de las grandes transnacionales de las industrias militar y del petróleo. Los ataques a las torres gemelas han venido a representar un gran pretexto para que los EU se reposicionen en el mundo poniéndonos en peligro a todos.

III

Después, Raúl Alvarez-Garín, exlíder del 68, matemático y trabajador electricista despedido de CFE, se refirió a las Objeciones a la Privatización del Sector Eléctrico Mexicano.

En su intervención dijo que, particularmente desde 1992, el gobierno federal ha venido trabajando en un proyecto encubierto de privatización eléctrica.

La propuesta, dada a conocer oficialmente n 1999, pobre y débilmente sustentada, propone basar el desarrollo futuro en plantas eléctrica del tipo Ciclo Combinado a base de gas natural. Sin embargo, existe varios problemas, entre otros, la disponibilidad de este energético.

De las reservas mundiales de gas natural México ocupa el lugar 14 con 1.8 billones de metros cúbicos en 1997. La extracción de gas natural asociado ocurre principalmente en las regiones Sur y Marina, y la de gas seco (no asociado) en la región Norte. Más del 80% de la producción corresponde a gas asociado.

De acuerdo a las características de los yacimientos mexicanos, la única manera de incrementar la producción de gas sería aumentando la producción de aceites. Esto, por cierto, corresponde al interés norteamericano de impulsar la producción petrolera mexicana hasta el orden de los 5 millones de barriles diarios (actualmente es del orden de 3 millones de barriles diarios).

En 2000, el mayor consumo nacional de gas natural correspondió al sector industrial seguido del petrolero y el eléctrico. De acuerdo a la prospectiva gubernamental, la demanda de gas natural por el sector eléctrico crecerá notablemente hasta ser el principal consumidor en 2007. La oferta total sería inferior a la demanda existiendo, por tanto, un evidente déficit. Eso significaría que habría que importar gas en volúmenes importantes.

Que la generación eléctrica del país, en un ambiente de empresas privadas, llegara a depender de gas importado con precios significativamente más altos que los precios nacionales, establecería una presión inevitable para el incremento de las tarifas del servicio. De manera que, hacer depender el desarrollo futuro del sistema eléctrico nacional del gas natural como energético primario introduce elementos de incertidumbre, dependencia y encarecimiento del servicio.

Hay otras importantes cuestiones como las relacionadas con la estrategia de privatización. A este respecto, baste señalar la crítica que se hace a la Comisión Reguladora de Energía (CRE). Esta, se dijo, es el espacio de negociación de los intereses privados con los organismos del sector público, para la definición y diseño de las normas y reglas de operación del proyecto de sistema eléctrico privatizado.

Actualmente, es una especie de Comisión de privatización eléctrica y promoción de negocios con gas natural. La CRE debe dar cuentas minuciosas y ofrecer la información y los estudios técnicos y financieros completos para su análisis por parte de todos los sectores interesados en el problema. Eventualmente se debería de redefinir sus funciones o desaparecerla.

IV

Con referencia a las posibles opciones energéticas, Leandro Meléndez, doctor en física, investigador del ININ e integrante del SUTIN, hizo una presentación sobre La Fusión Termonuclear y el Tokamak Novillo.

Se dijo que, un programa energético nacional tendrá que considerar las políticas mundiales, al igual que las nacionales, en cuanto a necesidades, estrategias y repercusiones.

A nivel mundial, las fuentes de energía están distribuidas aproximadamente de la siguiente manera: petróleo (37%), carbón (23%), gas natural (20%), combustibles renovables (10.9%), nuclear (6.5%), hidroeléctrica (2.2%) y otra (0.4%). El consumo, se distribuye principalmente en tres áreas importantes: electricidad (33%), gasolina y gasóleos (33%), carburantes y calefacción (33%9.

La demanda energética mundial cada vez es mayor. Esto representa diversos problemas, entre otros, ambientales. El 87 % del consumo actual de energía es contaminante. Organismos internacionales estiman que las emisiones de CO2, responsables del calentamiento global por efecto de invernadero, aumentarán para el 2010 casi un 50 % con respecto a los niveles de 1993.

Por otra parte, el consumo energético está desigualmente distribuido. Las naciones en desarrollo, cuya población representa más del 80 % del total, sólo consumen el 30 % de la energía consumida a nivel mundial. "Existen 2000 millones de personas que no tienen luz".

Se indicó que, el programa nacional de energía para los próximos 50 años, enfrentará, entre otros, dos fuertes compromisos: 1. Cumplir con una gran demanda de energía debido a una población creciente, 2. Cumplir con una legislación mundial que buscará reducir el calentamiento global.

Es conveniente optar por energías limpias y renovables. Desafortunadamente fuentes de energía tales como la Solar, Eólica y Biomasa están limitadas en su aplicabilidad, dado que su densidad de energía es muy baja. Otra opción es la energía nuclear de fisión, que ha tenido un crecimiento impresionante a pesar de los problemas con los desechos radiactivos y los accidentes severos ocurridos.

Por otra parte, está la energía nuclear de Fusión. Esta es la modalidad utilizada por el sol y las estrellas para generar las descomunales cantidades de energía que, en particular, le dan vida a nuestro planeta. El interés mundial tan grande en la Fusión se debe a que ésta sería la fuente de energía prácticamente inagotable, limpia y accesible, dado su combustible esencial (agua), para casi todos los países de mundo.

La energía nuclear de Fusión, quizá la más densa disponible, es decir, la que proporciona más energía por unidad de volumen, será comercialmente competitiva en un futuro, todavía incierto, de aproximadamente 40 años. Se ha comentado, por parte de especialistas que, "esta energía estará disponible cuando realmente se necesite".

En México se han dado los primeros pasos en Latinoamérica, después de Brasil, para iniciar la investigación científica y tecnológica en materia de Fusión Nuclear Controlada. En el Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares (ININ) se ha diseñado, construido y se tiene en operación una máquina electromagnética "Tokamak Novillo", con el objeto de crear la infraestructura científica y tecnológica que permita la participación de mexicanos en el desarrollo y aplicación de esta fuente tan importante de energía.

En un proyecto nacional de energía a 25 años no es posible incluir la energía nuclear de Fusión, en particular a las máquinas Tokamak, sin embargo es de gran importancia estratégica mantener y fomentar la investigación científica en este campo ya que las dependencias del extranjero, en particular la energética, pueden resultar, en este caso, en más "mexicanos sin luz"

2. Reestructuración de la Industria Eléctrica.

En la segunda sesión hubo cuatro trabajos.

V

Romeo Maisner, ingeniero mecánico de LFC e integrante del SME, hizo una presentación sobre La Privatización Eléctrica Furtiva.

Las reformas de 1992 a la Ley de Servicio Público de Energía Eléctrica (LSPEE) están permitiendo ala Secretaría de Energía (SE) privatizar de facto a la industria eléctrica nacionalizada. Las anticonstitucionales modificaciones establecen que No son parte del servicio público: la cogeneración, el autoabastecimiento, la producción independiente, la pequeña producción, la exportación, la importación y la generación para emergencias. En 1993, se publicó el Reglamento de la LSPEE.

Desde 1996, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) ha venido otorgando permisos para la construcción de todo tipo de plantas degeneración eléctrica. Para el año 2000 ya se habían otorgado 169 permisos: autoabastecimiento (11), cogeneración (37), producción independiente (14), exportación (1) e importación (6).

Se dieron muchos ejemplos que fueron detallados con precisión. Uno, tan solo uno, es el permiso E130/AUT/1999 para Mexicana de Hidroelectricidad S. A. de C. V. (Mexhidro). Se trata de una planta hidroeléctrica (originalmente de 30 Mwe) sobre el río Cutzamala para Siderúrgica Tultitlán y Colchas de México. Luego, por medio de una "ampliación" se incluyen más socios: empresas cerveceras, cementeras automotrices, mineras, papeleras, vidrieras y refresqueras; además, entidades de la administración pública como el Gobierno del DF y municipios de los Estados de México, Morelos y Guerrero.

De acuerdo a la LSPEE, la ampliación del permiso es para satisfacer las necesidades del conjunto de socios. De esta manera, se rebasa la capacidad inicial, dos industrias se transforman en todo un corredor industrial con grandes consumidores. Estos son grandes clientes del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) (de las llamadas "cuentas especiales en LFC), todos forman parte del servicio público de energía eléctrica pero dejarán de comprarle la energía al Estado. Así, se reducirán los ingresos de ventas de CFE y LFC, se descapitalizará a ambas empresas y los concesionarios pasarán de ser consumidores a productores. Las entidades públicas se considerarán como inversionistas particulares y los municipios ya no serán parte del servicio público. Después, las nuevas empresas podrían ser compradas por una transnacional sin que se pueda evitar.

Otro caso es Enertek (permiso CRE/36/COG/96 modificado varias veces), empresa del Grupo Alfa de Monterrey, vendida ya a Iberdrola, empresa eléctrica española que es el mayor inversionista privado en México. Estos y todos los demás permisos se han otorgado en condiciones similares o peores para "transformación, conducción y entrega de la energía generada". Esto es, se permite la generación, transmisión y distribución privadas.

De esta manera, la privatización se extiende por todo el país e incluye a plantas grandes. El autoabastecimiento viene s ser una fuga masiva de clientes del SEN que aportan importantes ingresos al erario nacional. Así, sin modificar la Constitución del país, se privatiza en los hechos a la industria eléctrica.

En breve síntesis se trata de desaparecer al servicio público, porque a los consumidores domésticos y a la pequeña y mediana industria se pretende agruparlos en regiones de distribución concesionadas a particulares.

Tratándose de la cogeneración y la producción independiente la situación es similar.

La pérdida de consumidores como la privatización de la industria eléctrica se están consumando de manera furtiva. A esto hay que agregarle las "reestructuraciones" que se llevan a cabo en CFE y LFC.

Enron,Iberdrola, FENOSA, Mitsubishi, Electricitè de France son las empresas extranjeras eléctricas que están tomando las decisiones en México. El concepto de Nación se está perdiendo y debe cesar esta privatización oculta que oscurece el futuro de la Patria.

VI

David Bahen también abordó la situación de la Privatización Eléctrica en México e hizo un balance.

Dijo que la nacionalización de la industria eléctrica es una gran conquista de los trabajadores y pueblo de México. Ahora, con motivo de los planes de privatización eléctrica, casi todas las voces han dicho No a la privatización y Sí a la apertura privada. Pero, ambas cosas son lo mismo e implican la desnacionalización, desintegración y privatización de la industria eléctrica, anticonstitucional y simulada.

En 1975, los electricistas y nucleares en lucha lograron la aprobación de la primera Ley de Servicio Público de Energía Eléctrica (LSPEE).

En 1992, se inicia la privatización eléctrica. Con las modificaciones regresivas a la LSPEE se modifica el concepto de Servicio Público, se permite al generación eléctrica privada y sed autoriza la utilización privada de la red eléctrica nacional. En 1993, 3l Reglamento de la LSPEE refuerza las medidas al definir la producción independiente como aquélla cuya capacidad sea mayor de 30 Mwe e indicando que CFE proporcionará el servicio de transmisión eléctrica. En 1994, Salinas emitió un decreto presidencial (al margen del Congreso) para empeorar las cosas. Con estas bases, en 1999, Zedillo propuso una iniciativa de reformas constitucionales. Hoy, Fox, privatiza en los hechos.

En 1999, la capacidad instalada nacional era de 35 mil 366 Mwe, correspondiendo al sector privado apenas 3 mil 453 Mwe, esto es, el 10% equivalente del sector público.

Entre 1996-99, los permisos privados otorgados representaban un total de 1 mil 975.56 Mwe estando en preparación proyectos por 5 mil 723.56 Mwe. En 2000, los permisos privados ascendían ya a 162. En el lapso 1999-2001, la capacidad instalada privada ascendió a 9 mil 655.8 Mwe.

Estos permisos son para la generación eléctrica a través de unidades de cualquier tipo. A la fecha se han otorgado permisos para instalar plantas termoeléctricas, principalmente de ciclo combinado, pero también de otro tipo: carboeléctricas, geotermoeléctricas, hidroeléctricas y eoloeléctricas.

En el período 1994-2000, la capacidad instalada privada ha llegado a 11 mil 999 Mwe. De entonces a la fecha, se han seguido autorizando cada vez más permisos privados para plantas de alta potencia. En junio de 2001, se otorgó a Iberdrola de Altamira un permiso para construir una plante de 1 mil 036 Mwe.

Considerando tan solo los permisos privados al año 2000, cuando la capacidad instalada total de la industria eléctrica nacional (CFE y LFC) ascendió a 36 mil Mwe, las concesiones privadas representan el 33% equivalente de la capacidad instalada estatal. Cada día, la proporción privada equivalente aumenta.

¡Esta es la apertura privada!, es decir, ¡La privatización!. De manera que, rechazar la privatización y apoyar la apertura privada es, en realidad, apoyar la privatización.

Todo esto ha ocurrido sin modificar la Constitución, todo se ha hecho en la práctica, con la complacencia de TODAS las cúpulas clericales, empresariales, políticas y sindicales.

Ante esta situación, el FTE reitera las propuestas más auténticas de los trabajadores electricistas y nucleares resumidas en tres importantísimas banderas: Integración de la industria eléctrica nacionalizada, Unidad sindical democrática y Contratación colectiva de trabajo única. Concretar estas propuestas no es asunto de definición sino de necesidad. Contra la privatización (o apertura), la integración industrial es tan necesaria como la unidad en un solo sindicato, el SME, Sindicato Mexicano de la Energía.

VII

Enseguida Francisco Javier Sáinz, ingeniero en comunicaciones y electrónica de LFC e integrante del SME, presentó un análisis sobre las Implicaciones del Mercado Eléctrico.

En su intervención señaló que, la industria eléctrica está siendo sometida a nivel mundial para introducir cambios y adecuarla al libre mercado. Esto forma parte de un proceso de reestructuración. Privatización, apertura, desregulación y competencia son los medios para introducir el modelo de mercado.

Sin embargo, se considera que ciertos segmentos como la transmisión deben ser regulados por el Estado. Esto para garantizar la confiabilidad del sistema de transmisión y garantizar el acceso a todos los participantes en el mercado eléctrico.

Indicó que, después de la crisis de California, en los Estados Unidos, los propios teóricos de la privatización reconocen que las cosa no han funcionado como esperaban. Entre otras consecuencias inmediatas, los precios de la electricidad se han multiplicado por más de 10 veces, entre 1998 y 2001. Pero, han señalado que, el diseño de un mercado eléctrico tiene retos técnicos importantes.

En este sentido, las líneas de transmisión son un punto neurálgico del mercado eléctrico. Preocupa su propiedad para mantener el control de la red pero no su planeación, desarrollo y mantenimiento.

Para operar el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM) se requiere las plantas generadoras pertenezcan a diferentes dueños y que exista un considerable exceso de generación eléctrica. Pero, comprar electricidad "a precios de tiempo real" implica muchas problemas de planeación, operación y comercialización, entre muchos otros.

Explicó que muchos parámetros de un sistema de potencia no están confiablemente caracterizados para operar en un modelo de mercado. Esto implica nuevos sistemas de información y comunicaciones que aporten datos suficientes y oportunos para garantizar la confiabilidad del sistema en TIEMPO REAL:

Además, hay implicaciones que no podrían evaluarse de inmediato. Resulta que el mercado no está bien regulado pero, tampoco se está avanzando en la desregulación. Esta es una evidente paradoja.

Lo único que propone el gobierno es un Proyecto de Reestructuración, buscando la "desmonopolización" de las actividades que actualmente desarrollan CFE y LFC; abriendo espacios a la participación de la iniciativa privada, principalmente en la generación, distribución y comercialización de energía, y garantizando que las empresas públicas y privadas convivan en igualdad de circunstancias en tres etapas: I. CFE y LFC se transforman varias empresas de generación y distribución y en una de transmisión, II. Operaría un mercado mayorista en generación, abierto a la inversión privada nacional y extranjera, III. Desincorporación progresiva de las empresas estatales (Transmisión y Distribución).

De manera que, el mercado eléctrico representa un riesgo para el sistema eléctrico nacional, mientras que, la CRE se ha extralimitado en sus funciones al llevar adelante un modelo no autorizado por el poder legislativo.

La alternativa está en la integración industrial, esto es, la restructuración del sector eléctrico nacionalizado buscando la integración de los procesos de las empresas estatales como medio para eficientar su operación. En este sentido, un buen principio podría ser la integración de un sistema de información estratégica. Por otra parte, para eficientar el servicio es impostergable la modernización de las redes.

VIII

Para finalizar José Manuel Pérez-Vázquez, trabajador electricista de LFC y representante sindical del SME, presentó un trabajo sobre el Plan Eléctrico Nacional.

En términos de las bases de la Política Energética Independiente, el FTE propone la formulación de un Plan Eléctrico Nacional cuyos objetivos serían:

Autosuficiencia eléctrica, Desarrollo social, Uso eficiente de energía, Balance energético racional, Autodeterminación tecnológica, Eficiencia operacional y Protección Ambiental. Este plan incluiría: el análisis del contexto internacional, la situación del sector energético nacional, la estructura productiva industrial, la investigación y desarrollo, comercialización, estructura financiera y balance de energía.

También se propone un Plan Estratégico de Desarrollo en la industria eléctrica nacionalizada cuyos objetivos serían: garantizar el suministro de energía eléctrica, diversificar las fuentes energéticas, el aseguramiento de la calidad y la confiabilidad. Tal plan contendrá programas específicos en materia económica, financiera, organizativa y de investigación y desarrollo que indiquen los lineamientos de acción e instrumentos. Se abordarían los aspectos políticos, técnico-científicos, económicos, financieros, organizativos, jurídicos, sindicales y laborales.

Estos planes serían realizados por los trabajadores del sector, con el apoyo de especialistas dispuestos a concretar alternativas nacionales, organizados en el Consejo Técnico-Científico (CTC) del FTE. El CTC es un órgano permanente especializado para la elaboración y concreción de la política eléctrica independiente; el análisis, estudio y definición de alternativas en materia científica, tecnológica e industrial; la formulación de propuestas sobre organización del trabajo y gestión industrial; los estudios sobre el proceso de trabajo; y, en general, la asesoría técnico-científica de los trabajadores.

Se desarrollaría un programa de trabajo que incluiría: diagnóstico, objetivos, estrategias, líneas de acción, metas, estimaciones presupuestales, instrumentación, control y evaluación, entre otros aspectos. Esto tiene como perspectiva: la integración de la industria eléctrica nacionalizada, la unidad sindical democrática de los electricistas y la contratación colectiva de trabajo única.

Los resultados serían presentados en las diversas sesiones del Foro Eléctrico Nacional que es una instancia para el análisis de las alternativas de los trabajadores; el desarrollo de la política eléctrica independiente; la presentación de proyectos técnico-científicos e industriales y, en general, para el fomento de las actividades académicas de los trabajadores pertenecientes a la industria eléctrica nacionalizada.

 

Al término de cada sesión, los asistentes hicieron preguntas a las que dieron respuesta los ponentes.

Para concluir el I Foro hubo dos intervenciones de comentarios. Primero, Humberto Plata señaló la importancia del evento realizado destacando el nivel de las propuestas presentadas, la seria crítica que se hace a la privatización eléctrica en marcha y la urgente necesidad de organizar las fuerzas de los trabajadores y pueblo de México en un gran Frente nacional en defensa de la Patria.

Después, César Torroella dijo que, como en los grandes momentos de nuestra historia nuevamente se definen las fuerzas, de un lado quienes apoyan la entrega de los recursos naturales y patrimonio nacional al capital y, de otro, los trabajadores que gallardamente defendemos nuestros intereses de clase y los de la Nación. Esto estamos haciendo los trabajadores de la energía de México, lo que nos enorgullece y honra.

Antes de terminar el I Foro, los compañeros H. Plata y C. Torroella fueron los encargados de entregar a los autores de los trabajos una constancia en reconocimiento a su participación. Previamente al evento, a todos los asistentes les fue entregado un libro conteniendo los trabajos completos, mismos que fueron presentados en forma audiovisual y videograbados para su difusión en un disco.

Puestos de pie, con el puño izquierdo en alto, clausuramos el I Foro cantando La Internacional y ¡Venceremos!

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